Era una de esas aperturas esperadas por la gran y buena trayectoria de Casanis en Marbella. A eso se suma lo que veíamos en Instagram desde que lo estaban construyendo (un crack la persona que lleva redes sociales) y fuimos a La Plage Casanis.
Me imaginaba un sitio espectacular estilo los sitios de playa de Punta del Este. Y todo lo que veía en instagram no me podía gustar mas. Sinceramente nada que ver con la realidad.
Entenderme bien y sin ofender y siempre hay que decir la verdad. Esta bien y tiene toques bonitos pero es muuuuuuy normal, además hizo que me acordara de un lema que siempre se dice en hostelería y que yo aplicaba cuando me dedicaba a ello “los camareros deben parecer como cisnes o patos, por fuera y lo que ve el cliente, tranquilo, elegante, aunque por debajo está pataleando”. Vi gente corriendo, camareros desbordados (porque eso si, está llenísimo), una, otra y varias confusiones. Vamos que no es que te atiendan y sirvan con dedicación y tiempo sino más bien un “corre corre y dime algo ya”.
Solomillo bueno, hamburguesa que pedimos poco hecha, pasada, rollitos muy ricos y ostras buenas (no de las mejores de Marbella) y sin separar, cosa que personalmente me molesta bastante.
El sitio (debe ser por los materiales que han usado o no se por qué) destaca por ser muy muy ruidoso.
Por ahora gran desilusión. También es verdad que acaban de abrir y está tan lleno que igual no han tenido tiempo de adaptación. Volveremos en un tiempo y os iremos contando.